En bici por el Canal de Garonne

En bici por el Canal de Garonne

Hoy recorreremos en bici unos pocos de los 193 km de largo de este canal que discurre entre Toulouse y Castets-en-Dorthe. Conectado a su vez con Canal de Brienne, el Canal du Midi, en Canal de Montech, y los ríos Garonne y Tarn, conforman el “Canal de los Dos Mares”, conectando el Mar Mediterráneo con el Océano Atlántico.

Hasta que finalizó la construcción del Canal, llegar al mediterráneo implicaba una travesía de más de 3000 kilómetros de longitud y, en aquellos tiempos, los que se aventuraban en esas travesías estaban sometidos a los riesgos de ataques y tormentas. Desde Nerón y Augusto en la antigüedad, pasando por Carlomagno, Francisco I de Francia, Carlos IX de Francia, y hasta Enrique IV de Francia, todo ellos barajaron diferentes proyectos para construir el canal, pero finalmente ninguno llegó a concretarse.

Fue recién en 1681 cuando Pierre-Paul Riquet construyó el Canal Real del Languedoc (ahora conocido como Canal du Midi) entre Sète y Toulouse, y también en aquellos tiempos se evaluó la construcción de una continuación hacia el noroeste, pero las sucesivas ampliaciones del castillo de Versalles y las pobres finanzas de Luis XIV vaciaron las arcas del reino y el proyecto nunca se materializó.

Después de varias idas y venidas de proyectos tanto en manos privadas como estatales, finalmente en 1838 fue el estado el que inició la construcción del Canal de Garone en varios puntos simultáneamente y empleando a miles de trabajadores, los que finalizaron las obras en 1856.

Con el correr de los años el canal fue lentamente cayendo en desuso, compitiendo en el transporte de mercaderías con el ferrocarril. Pero fue a partir de la década del 70, cuando el canal fue ampliado y permitió que barcos de mayor calado surcaran sus aguas, cuando la popularidad del canal comenzó a crecer nuevamente. Con estos barcos de mayor calado vinieron también una gran cantidad de visitantes, interesados en este sitio de excepcional significado natural e histórico. El punto de inflexión fue en 1996, cuando el canal du Midi fue clasificado como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, beneficiando también al Canal de Garonne. Ahora hay unos 1000 barcos que viajan entre el Mediterráneo y el Atlántico y viceversa cada año. La flota ha crecido de 12 barcos en 1970 a 450 barcos hoy y emplea a 500 personas en forma permanente.

De la mano de este aumento de visitantes, a lo largo de su recorrido ahora es posible realizar una completa variedad actividades deportivas. Pedaleando me imaginaba navegando por el canal… disfrutando de las vistas y, por supuesto, también llevando mi bici en la cubierta… y un kayak… y mis zapatillas de correr… y mi bañador… y… ¿Tú que te llevarías al Canal de Garonne?

He rodado por la vera del Canal de Garonnne gracias al apoyo de:

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