El Acueducto de Segovia
El Acueducto de Segovia
El Acueducto de Segovia es uno de los monumentos históricos más significativos y mejor conservados que quedan en España y el símbolo más importante de Segovia, como lo demuestra su presencia en el escudo de armas de la ciudad.
Aunque la fecha exacta de su construcción no ha podido ser precisada, los investigadores han indicado que se encuentra entre la segunda mitad del Siglo I y los primeros años de Siglo II, durante el reinado del emperador Vespasiano o de Nerva. Ni siquiera los inicios de Segovia en sí misma son conocidos con exactitud. Se sabe que la zona estaba habitada por un pueblo llamado Vacceos, antes de la conquista de la ciudad por los romanos.
El Acueducto de Segovia transporta aguas del río Fuente Fría, situado a unos 17 km en las montañas cercanas a la ciudad, en una región conocida como La Acebeda. En su punto más alto, el acueducto alcanza una altura de 28,5 m.
Desde el punto en el que el acueducto entra en la ciudad hasta que llega a la Plaza de Díaz Sanz, incluye 75 arcos sencillos y 44 arcos dobles, seguido de cuatro arcos sencillos, resultando en un total de 167 arcos. La construcción del acueducto sigue los principios establecidos por Vitruvio como lo describe en su obra De Architectura, publicada en la segunda mitad del siglo primero.
La primera sección del acueducto contiene 36 arcos de medio punto, reconstruida en el siglo 15 para restaurar una parte destruida por los moros en 1072. La línea de arcos se organiza en dos plantas, con una decoración sencilla, en la que los moldes predominantemente simples tienen marco y prestan apoyo a la estructura. Construido en dos niveles, los pilares principales de la parte superior son más cortos y estrechos que los de la planta baja.
La parte superior de la estructura contiene el canal a través del cual el agua se desplaza a través de un hueco en forma de U de unos 55 por 46 centímetros. El canal se ajusta continuamente a la altura de la base y la topografía en la que se encuentra.
También sus pilares aumentan gradualmente el tamaño de su circunferencia. La parte superior de cada pilar tiene una sección transversal que mide 1,8 por 2,5 metros, mientras que la base de la sección transversal mide aproximadamente 2,4 por 3 metros.
El Acueducto de Segovia está construido de bloques de granito sin argamasa. Durante la época romana, cada uno de los tres arcos más altos exhibían un cartel en letras de bronce, indicando el nombre de su constructor, junto con la fecha de construcción.
Hoy, dos nichos son todavía visibles, uno a cada lado del acueducto. Uno de ellos es conocido por haber albergado una imagen de Hércules, que según la leyenda fue el fundador de la ciudad. El otro nicho ahora contiene las imágenes de la Virgen de la Fuencisla (Patrona de Segovia) y San Esteban.